Nivel Intermedio - Avanzado
¿Cómo se prepara físicamente un Lanzador para su trabajo?
La preparación física es tan o más importante que el talento que posea un lanzador.
Hay ocasiones en que el talento se toma por suficiente, y no se le presta atención a la condición física del atleta, provocando este descuido algunas de las lesiones.
Las lesiones más comunes que sufren los lanzadores son lesiones del hombro y del codo.
Estas lesiones a nivel profesional, causan que el pelotero sea colocado en la lista de incapacitados, mejor conocida como el “Disabled List”.
Las lesiones del hombro o codo en cualquier nivel de béisbol que se participe causan una pausa en el desarrollo del lanzador.
Cuando se trata de preparación física para lanzadores el objetivo es:
el poder desempeñar la labor monticular y a la vez prevenir lesiones.
En otras palabras, el énfasis tiene que ser en desarrollar atletas y no solamente lanzadores.
Aquellos que desean conocer más acerca de la preparación física requerida para un lanzador deben prestar atención a lo que dicen los estudios científicos.
La modalidad hoy en día es que el atleta debe entrenar lo más específico posible a su deporte y/o posición de juego.
En otras palabras, el entrenamiento tiene que aproximarse lo más posible a la ejecución que se lleva a cabo en el terreno de juego.
En el pasado se entrenaba a todos los lanzadores por igual.
En la actualidad los lanzadores se entrenan a base del rol determinado que tienen en el cuerpo de lanzadores y el equipo.
Un abridor entrena diferente a como entrena un relevista.
Esto es así, para que el efecto y la adaptación del entrenamiento puedan transferirse a la posición de juego con mayor éxito.
Los lanzadores “abridores” deben prepararse para lanzar 9 entradas.
El entrenamiento consiste de entrenamiento aeróbico y anaeróbico.
Esto se logra por medio de las carreras largas y cortas, además del desarrollo y mantenimiento de fuerza muscular por medio del entrenamiento con pesas, ejercicios abdominales, agilidad y rapidez, velocidad y explosividad, y balance.
El entrenamiento aeróbico consiste de correr distancias largas para desarrollar nuestra capacidad de utilizar oxígeno y nuestra resistencia muscular.
Esta resistencia muscular en las piernas nos beneficia grandemente en el montículo. Uno de los métodos que se utiliza para desarrollar la condición aeróbica es el correr de 15-20 minutos el día después de haber iniciado un juego.
El sistema anaeróbico consiste en correr distancias más cortas para utilizar otros sistemas de energía en el organismo que sirven para los movimientos más rápidos requeridos en el juego. Por ejemplo, el correr del poste del bosque izquierdo al poste del bosque derecho en 30-35 segundos con descanso de 130 segundos entre repetición.
Se pueden hacer 10 repeticiones de esta carrera.
La agilidad nos ayuda a salir a cubrir toques, y la velocidad y explosividad nos ayudan a asistir jugadas en las bases y a utilizar con más fuerza las piernas cuando vamos a lanzar hacia el plato.
La parte central del cuerpo (abdominales) o pared abdominal nos ayuda a ser más eficientes en nuestros movimientos, nos da estabilidad en la columna vertebral, y une la fuerza de la parte alta con la parte baja del cuerpo.
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